Sindrome de abstinencia

El lunes empezo, tras un año sin probarlo, volví a tomar una dosis. Las reacciones no tardaron en aparecer, mucho sudor, ritmo cardiaco acelerado, cara roja. Respiracion entrecortada y algunas veces pesada. Pero yo seguía, manteniendo el ritmo, o lo intentaba, claro esta el cuerpo tiene sus limites, y en un momento dado, hasta creí, que llegaria a vomitar ahí mismo. Pero no, sigues, el nicki que llevas está empapado, no puedes ni con tu alma, mas terminas feliz, agotado, pero feliz.

El miercoles, no contento con todo esto, volví a tomar la dosis, he resistido un poco mas a sus efectos, pero si bien al terminar de tomarla, me deja destrozado.

Bien, que he estado tomando, lejos de lo que penseis, la dosis, no es otra cosa que clases de Judo. Si, ese deporte que he practicado durante años, y desgraciadamente deje al cerrar el gimnasio en el que entrenaba el año pasado. En todo este tiempo, he empezado a practicar esgrima, lo cual me gusta tb, y seguire entrenando este año.

Mas la verdad es que tras tanto tiempo haciendo judo, lo echaba de menos. algunos lo llamaran enfermedad, pero sinceramente. A mí me gusta. No voy a ser el campeon del mundo, pero bueno me servirá para seguir en forma. Que ultimamente tanta cenita y demas, empezaba a notarse. XDD

Ah!; y no, dudo mucho que me vaya a poner cachas y cosas de esas XDDD.

Y vosotros frikis vagos, habeis pensado en hacer algun deporte y ponerse en forma. Y algo mejor, por que no os poneis. XDDD

Mi vida sin reloj

Desde muy pequeño, había llevado en mi muñeca izquierda un reloj. Creo que el primero fue en mi comunion, un reloj digital, sencillo, hora, minutos y segundos, nada más.

Indudablemente, los años pasaban, la muñeca y el resto del cuerpo crecia, si bien, siempre había un reloj en esta muñeca. Siempre, en cualquier momento del día, miraba el reloj, sabia que hora era.

Pero claro, lo que genera el reloj es impresionante, miras el reloj cuando te aburres, cuentas el tiempo en diversas situaciones. Pero eh!; tiempo pasa.

Hsata que un día, mi viejo reloj casio (otro muy viejo, pero no el de la comunió), decidió joderse definitivamente, con el se fueron, dos cambios de correas, muchos rayotes en el cristal, y botones semi atascados.

Ahora bien, ahora vivo sin reloj en la muñeca, lo extrañé al principio, pero la verdad es que prefiero seguir así.

No se si os pasará a vosotros, pero es un maldito ser diabolico, tu reloj, puede llegar a ser todo un monstruo. Es como una obsesion, amen de que sirve para controlar todo, o al menos aparentar que lo controlas. Uffff, no es de mi gusto. XDD

Pero evidentemente, nunca puedes salirte del todo del ciclo. De vez en cuando otro reloj aparece en mi muñeca, pero procuro que no me domine.

El tiempo pasará igual, tengas o no un reloj.